jueves, 6 de junio de 2019

Temores de revolucion en Bolivia y que fracase la Alianza

Transcripción de unas notas que hablan sobre la revolucion de Núñez del Prado en Bolivia a finales de 1879, y el temor a que fracase la Alianza.


[Fotografía del antiguo teatro de la ciudad de La Paz, Bolivia]

NUM. 249. MINISTERIO DE RELACIONES EXTERIORES.

(Reservada.)

Lima, Noviembre 26 de 1879.
Señor Ministro:
La Legación de la República en La Paz ha comunicado por el último correo a este despacho, ocupándose del orden interior de Bolivia, que se temía y aun se preparaba una manifestación contra el Gobierno constituido, manifestación que podría tomar el carácter de una revolución en forma, apenas se supiese en el público que las armas aliadas habían sufrido un revés.



Agrega la misma Legación que el 18 del mes corriente un grupo de cholos había recorrido el barrio llamado de Chocata dando vivas a Chile y a Soto. Este Soto (don José María Segundo) es el comandante de armas de Calama, que estaba propagando entre los indios que los chilenos traían la abolición del tributo y la más amplia independencia de su raza.

El Cónsul peruano en Cochabamba, dice también que hay todavía mucho chilenismo, a pesar del odio actual a los chilenos, y que la miseria espantosa es una de las causas del desaliento general; agrega en segunda que Bolivia tomará, sin embargo, su parte en la lucha sacrificio que se prepara, aunque no de buena voluntad. Sin dar a las anteriores informaciones una gran importancia, he juzgado indispensable trasmitirlas a V. S., así por ser V. S. Presidente del Consejo, cuanto porque ellas se rozan con el despacho que corre a su cargo.

Dios guarde a V. S.

RAFAEL VELARDE.

Al señor Ministro de Estado en el despacho de Guerra y Marina.
_______

NUM. 201.- MINISTERIO DE RELACIONES EXTERIORES.

(Reservada.)

Lima, Diciembre 10 de 1879.

Señor:

Se ha recibido en este Ministerio la nota reservada de V. S número 245, fecha 22 de Noviembre último, en la cual da V. S. cuenta de la situación política de esa República y de otros incidentes que se relacionan con el ejército aliado.
Según noticias que ha recibido el Gobierno por conductos respetables, ha estallado ya en La Paz el movimiento revolucionario que V. S. temía se verificase de un momento a otro.

En comunicaciones anteriores se han trasmitido a V. S. las instrucciones convenientes, a las cuales debe V. S. sujetar su conducta ante el nuevo estado de cosas creado en esa República.

La Alianza que liga a ambos países y que en la actualidad se hace efectiva, no fue estipulada entre sus gobiernos sino entre ambas repúblicas, y cree el Gobierno del Perú, que cualquiera que sean los caracteres que distingan al nuevo Gobierno de Bolivia, éste permanecerá fiel a la Alianza, solemne compromiso que adquirió ese país garantizando su cumplimiento con su fe y honra nacional.

Espera este Ministerio con ansiedad el próximo correo en que recibirá de V. S. detallados informes sobre los sucesos realizados en La Paz, y en vista de ellos se trasmitirán a V. S. las instrucciones que las circunstancias las hagan necesarias.

Dios guarde a V. S.

RAFAEL VELARDE.

Al señor Enviado Extraordinario y Ministro Plenipotenciario del Perú en Bolivia.
______

INSTRUCCIONES AL MINISTRO DE BOLIVIA CON MOTIVO DE LA REVOLUCION DE NÚÑEZ DEL PRADO.

MINISTERIO DE RELACIONES EXTERIORES.

(Reservada.)

Lima, Diciembre 6 de 1879.

Señor:

Ayer se recibió en esta capital la noticia de que había estallado un movimiento revolucionario en Bolivia, asegurándose que había sido encabezado por el señor Núñez del Prado, bajo la decidida colaboración del señor Reyes Ortiz. Sin embargo, el Gobierno no tiene informes oficiales sobre el particular y duda de la realidad de tales sucesos, que afectarían los vínculos de la Alianza, supuesto que, siendo indispensable continuar las operaciones de la guerra con toda la energía posible, conviene hoy, más que nunca, contar con la tranquilidad interior de los países aliados, a fin de conservar intactas sus fuerzas, arbitrar nuevos elementos de guerra y dar a la campaña un poderoso impulso. Tal es el sentimiento dominante en el Gobierno y en el pueblo del Perú, en quienes, lejos de disminuir, ha aumentado la fe en la victoria definitiva.

Una interrupción en el orden interior de Bolivia sería quizás un motivo de demora en preparar los medios con que está obligada a contribuir, y podía, además, hacer perder moralmente en la conciencia y en las simpatías universales que hoy le son favorables lo mismo que al Perú.

Pero como la Alianza no es con un Gobierno sino con la República, conviene que V. S. sea muy prudente en su conducto, alejando todo cuanto pudiera crearle prevenciones y dificultades en el desempeño de su misión.

No debe V. S. intervenir en las cuestiones de partido, sino para conciliar los intereses opuestos y encarecer la necesidad de ocuparse de la guerra hasta derrotar a nuestros enemigos, conservando las más cordiales relaciones con todos y sin dar a su palabra y a sus actos un carácter de preferencia y de condenación, que pudiera hacerlo antipático para un círculo político determinado.

Por lo demás, el Gobierno cree que el señor Reyes Ortiz, que conoce muy bien la historia de la Alianza y la situación actual, es un personaje que puede prestar a su país inmensos servicios, y no dudo de su honradez e ilustración.

Después de estas instrucciones generales, no me queda sino recomendar a V. S. que informe detalladamente a este despacho sobre los principios que la revolución proclama, en el caso de ser ella cierta; sobre los hombres que figuran como autores del movimiento, y en fin, sobre lo que allí se dice y se piensa, con tal motivo, respecto de las relaciones de Bolivia con el Perú.

El Gobierno, que hasta aquí ha cumplido sus deberes de aliado con Bolivia, más allá de lo que los tratados estipulan, confía en el patriotismo de los bolivianos para creer que hoy como ayer, no desmayarán en ofrecerlo todo por la guerra, y espera que V. S., colocándose a la altura de su puesto, sabrá interpretar fielmente los sentimientos que él abriga.

Dios guarde a V. S.

RAFAEL VELARDE.

Al señor Enviado Extraordinario y Ministro Plenipotenciario del Perú en Bolivia.

Fuente: Ahumada Moreno, Pascual, Guerra del Pacífico: recopilación completa de todos los documentos oficiales, correspondencias y demás publicaciones referentes a la guerra que ha dado a luz la prensa de Chile, Perú y Bolivia, conteniendo documentos inéditos de importancia Tomo II, Imprenta i Lib. Americana de Federico T. Lathrop, Valparaiso, 1885, P. 35.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario